Las situaciones límites – guerras, hambrunas, pestes – exponen descarnadamente lo peor y mejor de las personas y sociedades. Hoy, con la pandemia, se demuestra en médicos, enfermeras, policías, laburantes dando el máximo; como también en quienes todo es joda, apedrean médicos, mienten, escupen y golpean a periodistas.
Dejan sin trabajo a laburantes con absoluta frialdad. Mienten descaradamente ante las cámaras, circunspectos. Disponen políticas públicas perjudiciales hasta con lágrimas en los ojos. Te dejan sin nada, sonrientes. Te atacan o matan, festejando. Desde Nerón a Hitler; Stalin o Carlos Eduardo Robledo Puch; Mengele o Alejandro Torrico; Mao Ze Tung, ‘Yiya’ Murano, Arquímedes Puccio. O egoístas festejando.
Empresarios/as, politicos/as, gobernantes/as, abogados/as, o periodistas jefes, son – además de estafadores/as y asesinos/as – las principales personas, con algún grado de poder social, económico o político, caracterizados como sociópatas. Son inteligentes, carismáticos/as, encantadores/as, seductores/as y manipuladores/as. La mayoría son varones. Cada vez hay más mujeres.
El y la sociópata se caracteriza por carecer de empatía hacia los demás, egocentrismo, desapego a las normas sociales, manipuladores de sentimientos, impulsivos/as. Carecen de sentimientos de culpa, vergüenza o arrepentimiento. Pese a ser antisociales, se adaptan perfectamente al medio social, están a nuestro alrededor, obtienen privilegios económicos, políticos y sociales.
Arrogante
Miguel Angel Caminos estaba sin barbijo cuando se acercó al fotoperiodista Javier Corbalán. Tras increparlo e insultarlo, le escupió en la cara. Además de la vil y cobarde acción, en pleno ascenso vertical de los contagios de Covid 19, significa el peligro de poner en peligro la salud y vida del trabajador de prensa.
Esto ocurrió en una manifestación opositora anticuarentena contra los gobiernos nacional y provincial, el 13 de septiembre en el Monumento a Güemes, en la ciudad de Salta. Tres días después, fue detenido por la Policía y trasladado al Hospital psiquiátrico Miguel Ragone.
“¿Si me arrepiento? No, ¡ni loco me arrepiento, lo haría de vuelta 10 veces!”, gritó al momento de la detención. Pareciera entonces un pobre loquito, un inimputable.
Empero, pese a las conductas similares, hay diferencias entre un sociópata y un psicópata. Este es un enfermo mental de nacimiento.
Tu derecho, mi derecho
Democráticos derechos poseen quienes se oponen y se manifiestan contra los gobiernos del presidente Alberto Fernández y el gobernador salteño Gustavo Sáenz. En el marco de las leyes y normas. Por ejemplo, la prohibición de realizar actividades masivas.
En Salta, la centenaria celebración al Señor y la Virgen del Milagro – que en las multitudinarias peregrinaciones desde todos los pueblos salteños y la procesión del 15 de septiembre ronda el millón de participantes – se realizó con la devoción de los devotos católicos en y desde sus casas.
Que tremenda expresión popular de fe, imposible de lograr por otro medio, organización o persona, se haya manifestado, silenciosamente, en familia, por las redes sociales, sin disturbios, da cuenta de un poder superior a la violencia.
AIRE FRESCO
Entre las llamas de la peste, las nuevas autoridades en el Ministerio de Salud de Salta y el COE ampliado, parecen dar aire fresco.
De a poco, los teléfonos de 911, SAMEC, Covid 19, atienden. Era el reclamo de la gente común, clase media y pobres, quienes no tienen “contactos” y mucho menos plata. Entre ellos y ellas abunda la sospecha de la exclusión social y el racismo.