“Hace décadas que las autoridades, por plata, autorizan a inmobiliarias y constructoras a construir en zonas que los estudios dijeron que eran inundables”, contó Claudia, una argentina residente en la provincia de Valencia, a Norte Social
“Mamás abrazadas a su bebé, dentro del auto, ahogados; o abuelos, o personas arrastradas en las calles por el agua y el barrio, muriendo aplastadas entre autos, contra paredes”, describió Claudia.
El desastre se desató el martes 29 de octubre, en las áreas urbanas de Valencia, ciudad del Mediterráneo español. Tormentosas lluvias, desbordes de cursos de agua, inundaciones. Estos fenómenos han sucedido en décadas pasadas. La diferencia es que antes, por advertencias científicas, no se vendían ni se construía en esas tierras inundables.
Saber escuchar
De hace veinte años es la película “El día después de mañana”, escrita y dirigida por Roland Emmerich. Ante los avances del cambio climático, el científico Jack Hall (Dennis Quaid) explica en la Casa Blanca la venidera catástrofe y la urgencia de evacuaciones masivas. Burlón, el vicepresidente Becker (Kenneth Welsh): “usted siga haciendo ciencia y déjenos a nosotros la política”.
Poco antes de la tragedia, José Ángel Núñez, jefe de Climatología de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Valencia, en declaraciones citadas por la Cadena Ser, aseguró “una catástrofe humanitaria se va a producir y va a ser la más grave en España”
Por su parte, Jorge Olcina, climatólogo de la Universidad de Alicante, le dijo a BBC Mundo que “estas cosas no deberían ocurrir en un país desarrollado que cuenta con los medios con que cuenta España”
Pese a que la Agencia Estatal de Meteorología elevó al máximo su nivel de alerta en la mañana del martes 29 y advirtió de “un nivel de riesgo para la población muy alto”, las autoridades autónomas no adoptaron medidas excepcionales.
A medida que se encuentran cadáveres, quedan en evidencia las irresponsabilidades políticas. Las personas murieron ahogadas en los autos en que viajaban, caminando, en sus viviendas.
NO IMPORTA LA VIDA
Valencia es una de las zonas más densamente pobladas y turísticas de España. La tierra es cara. Caótica la ocupación urbana. “Mis amistades son geólogos, científicos, y me contaron que desde hace décadas se construye en zonas inundables”, contó Claudia, la argentina residente en Valencia.