Su aspiración es lograr que el viejo hospital San Bernardo vuelva a ser líder en excelencia médica en la Argentina. Formado en emergencias, subraya la atención al paciente. Y por esto, homenajea la enfermería. Instalará tecnología de punta en COVID 19.
Pablo Salomón es doctor cirujano general. Apenas recibido, comenzó a trabajar en el Hospital Regional de Agudos San Bernardo, y su forja fue la Guardia de Emergencias, en donde llegó a ser jefe de la crítica área.
Desde fin del año pasado es el nuevo gerente del establecimiento de autogestión.
Postulados de su flamante gestión son la dirección médica, priorizando la relación con el paciente como humano necesitado; el crecimiento de la infraestructura y el equipamiento con tecnología de punta. Todo para lograr la excelencia y volver y superar incluso las épocas de oro del nosocomio más importante del norte.
– ¿Qué cambios quiere impulsar en la relación entre médicos, enfermeras y pacientes?
– Hemos inaugurado la Dirección Médica precisamente por lo que me pregunta. He sido un partícipe de, por ejemplo, lo que significan los accidentes de transito, con más de 20 años en Emergencias, y siendo Jefe de Guardia. Siempre tuve como norma que trabajemos en equipo.
El enfermero, la enfermera, hacen un trabajo admirable: son quienes están al lado del paciente. Hay que reconocerles mucho más, es una profesión castigada. Hay cosas que sólo ellos y ellas las hacen. Son solidaridad pura, viven el conflicto, la miseria humana. Por esto, nuestra gerencia quiere darle la impronta a esa relación estratégica, con la Dirección Médica. Nuestro objetivo es el paciente; el es el centro de todo el hospital.
Alcanzar la excelencia
– Esto recuerda a Ramón Carrillo…
– Es que de a poco de se fue perdiendo la relación con el paciente, se fueron perdiendo valores, valores que quiero revitalizar. Y otra, queremos que el San Bernardo vuelva a ser líder en el norte argentino. Tenemos tecnología de punta, mejor que en establecimientos privados, pero queremos más, queremos llegar a la excelencia. Y por eso, también, desterrar la burocracia, ser transparentes en todo. Es una política a largo plazo.
Estilo sin yapas
Al pie del cerro tutelar de la ciudad de Salta, el San Bernardo fue inaugurado el 20 de Febrero del año 1960 como Hospital Público General de Agudos. Su estilo arquitectónico lo convierte en un bello edificio, enmarcado en un magnífico entorno natural.
“Le cuento una anécdota”, contó Salomón. “Hemos recibido una donación y con eso estamos remodelando la morgue. La vamos a diferenciar del área de Anatomía Patológica. Le pregunto al arquitecto como iban a ser el techo y los pisos, entonces él me dice que iba a ser un techo bajo y contrapiso de cemento. Le dije no, que el piso debía ser de porcelanato, con la mejor iluminación y techos altos, siguiendo la línea arquitectónica del hospital tan lindo que tenemos: techos altos, de cinco, seis metros. Entonces el arquitecto me dice, ´sabe que pasa doctor, nosotros estamos acostumbrados a yapar´ Pero si yo quiero la excelencia, no sirve yapar”.
SIN INFECCIONES INTRAHOSPITALARIAS
El doctor Salomón anunció que en 60 días habilitaría una sala COVID con tecnología de punta: sala de presión negativa y positiva con filtro HEPA ( (High Efficiency Particulate Air) “Nos manejamos con normas internacionales, y estamos copiando a quienes les fue bien, los chinos. Estamos haciendo una zona Covid totalmente independiente, con filtros HEPA en sala de presion negativa positiva”, contó.
Los filtros HEPA están compuestos por una malla de fibras que filtran bacterias y virus. Las salas con presión negativa y positiva impiden que el aire dentro de un área crítica salga al exterior, y viceversa.
Además de potenciales enfermos de coronavirus, sirve para todo tipo de inmunodeprimidos. Estos evita las infecciones intrahospitalarias.
COVID 19
– En materia de la pandemia de covid 19, ¿dónde estamos parados?
– El virus tomó a todo el mundo desprevenido, no lo esperábamos. Por lo tanto, los conocimientos y experiencias son escasos. Todos los días estamos aprendiendo, por día se publican alrededor de 150 trabajos, con menor o mayor rigor científico. En realidad, le digo, es que estamos navegando y construyendo el barco al mismo tiempo…