Dice el principio jurídico: “a confesión de parte, relevo de pruebas”. Pero mucho más contundente es el que afirma: “a las pruebas me remito”. Tal sería el caso del cotejo de ADN que habría resultado positivo, en el caso de Javier “Chino” Saavedra.
(Imagen portada: JAVIER “CHINO” SAAVEDRA)
Extraoficialmente, los resultados de las pruebas genéticas confirmarían que las muestras “Hombre 1” y “Hombre 2”, darían correspondencia con el ADN de Javier Saavedra. Este joven fue detenido el martes 20 de septiembre, en Santa Victoria Este.
Los ADN son claves. Luego, la sociedad demanda conocer los por qué.
La pericia se inició con la intervención de los peritos propuestos por la defensa de los tres imputados, quienes accedieron a la extracción del ADN, y de los profesionales del Laboratorio del Servicio de Biología Molecular del DTC (Departamento Técnico Científico), del CIF.
Jimena tenía 44 años. Madre de dos hijas mellizas de tres años. Estaba casada con Nicolás Gauffín Cajal, gerente de la cadena de electrodomésticos Garbarino. Mujer inteligente, sensible, con inclinaciones artísticas. Participaba de un taller literario dirigido por el escritor José Agüero Molina.
Dos jóvenes simpáticos, de buen aspecto, educados, aparentemente sensibles, la masacraron de 57 cuchilladas. Dentro de su casa en Vaqueros, el mediodía del 27 de enero de 2017.
En media hora
Nicolás Cajal habló – mediante celular – habló con Jimena Salas a las 13.15 del 27 de enero de 2017. Ella estaba en su casa junto a sus hijas mellizas de tres años. A las 13.45, Cajal contó que encontró a su esposa asesinada y a las pequeñas encerradas en un baño de la casa. En media hora se consumó uno de los peores crímenes en Salta.
En esos fatales minutos, dos jóvenes llegaron hasta la vivienda de Jimena, le mostraron un perrito que dijeron extraviado, lograron que ella les franquease la entrada, y luego en el living, le asestaron 57 cuchilladas a la pequeña mujer. Llamativamente, fueron compasivos y encerraron a las nenas. Se fueron dejando tras de ellos una casa bañada en sangre, sin llevarse – aparentemente -nada. La alarma había sido desconectada en la víspera.
Nueve de las heridas mortales fueron en el cuello. Jimena Salas se defendió hasta último momento. Su cadáver se encontraba en un baño de sangre. Las huellas sanguinolentas iban desde el living hacia el placard en el dormitorio. Jamás se encontró el arma asesina.
Por la masacre, la fiscalía detuvo a los Saavedra.
¿Por qué mataron a Jimena?
Se afirma que los asesinatos violentos se cometen por:
- Odio/ Venganza
- Descontrol emocional
- Enajenación mental
- Para ocultar otro crimen
- El crimen organizado
De acuerdo a las fuentes, luego del juicio por el femicidio, “si o si hay que reelaborar el perfil victimológico, los perfiles criminales y afinar las hipótesis”.
Por lo pronto, al menos desde el periodismo, se reactualizan las sospechas acerca de los miedos de Jimena y su participación en un taller literario.
Precisamente, el escritor José Agüero Molina estuvo a cargo de las clases que tomaba la víctima, hasta que fue asesinada. Según el artista, Jimena tenía miedo pues estaba amenazada de muerte. Así lo reflejó la periodista Andrea Sztychmasjter, en el semanario Cuarto Poder.
La comunicadora citó tres interrogantes, manifestados por Agüero: “¿quién se benefició?, ¿quién se sacó un peso de encima?, ¿cuál es la cuestión del dinero detrás del crimen?”
GENÉTICA
El Servicio de Biología Molecular, integrante del Laboratorio Forense del CIF, cuenta con un Departamento de Genética donde además funciona el Banco de Datos Genéticos de la provincia de Salta, e integra la Red Nacional de Bancos de Datos Genéticos. El estándar internacional implementado es la Norma ISO 17025, que otorga competencia técnica y validez a los resultados de las determinaciones analíticas.
SIN RAZONES APARENTES
Jimena Salas tenía 44 años. Culta, sensible, tímida, reservada. Todo daría cuenta de una víctima de bajísimo riesgo. No había razones para asesinarla brutalmente.