LA MASACRE DE JIMENA: SIETE AÑOS DE MISTERIO

LA MASACRE DE JIMENA: SIETE AÑOS DE MISTERIO

Los tres hermanos Saavedra serán juzgados este año, acusados del cruento femicidio de Jimena Salas, en su casa de Vaqueros. La convicción fiscal se enfrenta a los “ruidos” producidos por tres investigaciones y un juicio absolutorio.

 

Hacía calor aquel mediodía del 27 de enero de 2017.

Las nenas jugaban mientras Jimena comenzó a preparar el almuerzo, en su casa del tranquilo barrio San Nicolás, en el pueblo de Vaqueros, algo más de diez kilómetros al norte de la ciudad de Salta. Mujer culta, tímida, discreta, lejana a relaciones o situaciones de riesgo. Habiendo superado las cuatro décadas, decidió ser madre. Fueron dos mellizas, en ese momento de tres años. Las nenas eran el fruto de su matrimonio con Nicolás Cajal, gerente de la cadena de electrodomésticos Garbarino.

El hombre se comunicó mediante celular con Jimena a las 13.15. A las 13.45, Cajal dijo que encontró a su esposa asesinada y a las pequeñas encerradas en un baño de la casa. En media hora se consumó una de las peores masacres en Salta.

57 puñaladas al menudo cuerpo de mujer.

Nueve de las heridas mortales fueron en el cuello. Jimena Salas se defendió hasta último momento. Su cadáver se encontraba en un baño de sangre. Las huellas sanguinolentas iban desde el living hacia el dormitorio.

VAQUEROS. CASA DONDE ASESINARON A JIMENA

El 26 de mayo de 2021, el viudo Nicolás Cajal y Sergio Vargas fueron absueltos del femicidio de Jimena Salas (el primero por supuesto encubridor, y el otro por cómplice de los asesinos). El tribunal dictó las absoluciones “in dubio pro-reo” (las dudas que favorecen al acusado)

 

Nuevo juicio

Hasta ese momento, hubo dos investigaciones distintas. La primera, un femicidio en ocasión de robo. La segunda, asesinato relacionado con lavado de dinero. La actual investigación retomó la hipótesis inicial.

La jueza de Garantías 1 Ada Zunino ya pidió el juicio en contra de Adrián Guillermo, Carlos Damián y Javier Nicolás Saavedra. Acusados de los delitos de homicidio calificado por alevosía, ensañamiento, criminis causa por el concurso premeditado de dos o más personas y femicidio, en perjuicio de Jimena Salas. Asimismo, la magistrada rechazó el pedido de nulidad y oposición, presentado por el defensor Marcelo Eduardo Arancibia

La causa cuenta con 18 cuerpos. Aproximadamente 18 mil páginas.

El 20 septiembre de 2022, los hermanos fueron detenidos. Las órdenes de allanamientos y detenciones (en la ciudad de Salta y en Santa Victoria Este) fueron dictadas por la jueza Ada Zunino.

El 1 octubre de 2022 El Ministerio Público Fiscal, en boca del procurador Pedro García Castiella, anunció que la investigación indicaba que los Saavedra eran los asesinos.

JAVIER SAAVEDRA, EN SANTA VICTORIA ESTE

El más comprometido es Javier. Por supuesta coincidencia entre los rastros de ADN recogidos en Vaqueros y la identidad genética del joven.

Según el abogado Marcelo Arancibia, “he demostrado, con pruebas, argumentos, lógica, que los hermanos Saavedra nunca estuvieron ni siquiera cerca de la casa de Jimena Salas, en Vaqueros, el 27 de enero de 2017. El único caballito (de batalla) que tienen es el ADN, y esto vamos a demostrar que es producto de un error técnico o un error humano”

El defensor pareció estar al borde de mencionar “manipulación”.

 

 

CONTINUARON CON SUS VIDAS

Después de masacrar a una mujer, se supone que los asesinos desaparezcan. Paradójicamente, los hermanos Saavedra continuaron con sus vidas normales. Adrián trabajando en Aguas del Norte (el 27 de enero de 2017 lo habría hecho entre 7 y 18); Carlos, en una casa de comidas en Parque Belgrano; y Javier, en una parroquia en Santa Victoria Este.

Supuestamente, ninguno de ellos huyó ni se ocultó. Tal como se supone que harían mortales criminales.

Arancibia destacó una situación significativa por parte de Javier Saavedra. “Éste joven, con notoria vocación solidaria, fue nombrado por el gobierno actual para trabajar en Santa Victoria Este. Este pueblo se encuentra a pasos de la frontera con Bolivia y Paraguay. Y jamás huyó, lo cual haría cualquier criminal. De esto dan fe tanto el padre Martín Caserta, de la Orden Franciscana en donde estuvo Javier, como la funcionaria Verónica Figueroa”

Asimismo, Javier Saavedra fue entrevistado por el periodista Nelson Castro, en TN, en Santa Victoria Este.

 

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