Desde la necesidad de más y mejores hoteles y restaurantes, a demanda de trabajadores calificados. Salta se encuentra en la puerta de un cambio económico y social inédito, superando postergaciones geopolíticas y sociales. De mano del litio.
Por Dario Illanes
“Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida”, dijo el creativo Woody Allen.
La frase es apropiada para ubicarnos en las necesidades del mundo y los recursos que posee Salta. Se dice como frase hecha que es una provincia pobre. Paradójicamente, la pobreza de gran parte de su población difiere de sus riquezas existentes en su variopinto territorio.
La guerra en Ucrania expone que la energía es vital. Los vecinos europeos reciben boletas con descomunales aumentos en la luz, gas, agua. Y los combustibles convencionales son más caros. Las proyecciones futuristas acerca de fuentes limpias, para 2050, han quedado desactualizadas luego que Rusia cerrara los caños. El cambio de la matriz energético es para hoy.
Estas son algunas de las razones por las cuales esos lejanos, desiertos, olvidados desiertos de sal en la actualidad son parte de la agenda geopolítico de las grandes potencias. Y la aparente ventura de las regiones más pobres de la Argentina.
No es “buenos y malos”
En las metrópolis, la situación del litio se reduce a falsas contradicciones: la explotación millonaria y el daño del ecosistema. Se menciona el beneficio y la visibilidad que en algunos casos derramarían los proyectos mineros sobre comunidades olvidadas. Y éstas a la vez son caricaturizadas como bucólicos y homogéneos grupos en comunión con la naturaleza. Los hay ecologistas como otros deseosos de mayor participación en las ganancias del negocio extractivista.
Por otra parte, el entusiasmo por el litio resulta en una de las escasas coincidencias entre dirigentes políticos contrarios. Por ejemplo, el jujeño radical Gerardo Morales, el kirchnerista formoseño Gildo Insfrán y el salteño peronista Antonio Marocco, lograron bloquear en los últimos días la Ley de Humedales. Esto por cuanto entienden que amenaza las posibilidades de explotación de este mineral en los salares. Y los consecuentes beneficios para las provincias postergadas.
Asimismo, el litio ha sido uno de los tres temas centrales que los gobernadores llevaron en su gira por Estados Unidos. Como bloque están adquiriendo un poder en el mapa político nacional.
RECURSOS PROPIOS
“El desarrollo del Norte Grande es el desarrollo de la Argentina, porque con la corrección de asimetrías que planteamos no queremos quitarle recursos a nadie sino generar nuevos ingresos y mejorar la distribución” 
Antonio Marocco. Vicegobernador de Salta
SAL Y AGUA
La extracción del litio se trata de la que está por debajo de los salares. Se extraen millones de litros de salmuera por día a través de tubos que bombean por debajo de la tierra. Eso es procesado y luego se produce el mineral para las baterías. La crítica ambientalista radica en que millones de litros de agua por día, que salen desde el subsuelo, afecta a los cursos de agua, en la fauna, la vegetación, y los residuos a cielo abierto.